La región colindante de manera inmediata al Mar de Cortés, debido a su abundancia en arena, la vuelve un lugar inhóspito para el cultivo de casi cualquier semilla, nadie vendrá a decirles lo contrario a la comunidad Seri de dicho sitio.
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Sin embargo, gracias a un trabajo de tres años, las mujeres de la etnia Comcáac residentes de Punta Chueca han logrado levantar su propio huerto de hortalizas orgánicas para el autoconsumo de la comunidad.
Érika Adriana Barnett Díaz, coordinadora de esta actividad, indicó que fue posible levantar este proyecto sobreponiéndose a la carencia de agua que se vive en la región, logrando producir 19 especies de hortalizas.
“A mí siempre me ha gustado la idea de tener un huerto, porque en el pueblo donde vivimos no se consigue tan fácil, ni frutas ni verduras, era un sueño para mí tener un huerto”, compartió para El Sol de Hermosillo.
De acuerdo con la responsable, esta idea comenzó en compañía de sus dos hijos y su esposo con recursos propios, comprando las semillas, palas y material necesario para comenzar esta aventura agricultora.
El proyecto ha progresado tanto que, al día de hoy, trabajan junto a Érika Adriana nueve familias más, incluso se espera que más personas se involucren en el desarrollo de estas hortalizas en el futuro.
“Esta iniciativa beneficia a todas las personas que trabajamos en este proyecto, pero también regalamos verdura a nuestros vecinos”, explicó.
Actualmente en los cultivos Comcáac se producen rábanos, tomates cherry, tomate bola, calabacitas, calabaza, zanahoria, betabel, ajos, maíz, cilantro, espinaca, acelga, cebollas, lechugas y papas.
Por fortuna la iniciativa ha sido respaldada por autoridades, tales como la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), la cual estuvo apoyando durante dos años seguidos el desarrollo del proyecto.
Asimismo, los huertos de hortalizas de la comunidad Seri comenzaron a tener el respaldo de la agencia de alimentos Arizona Food Bank Network, teniendo como enlace el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI) y la organización Color Tierra.
Según el testimonio de Érika Adriana, también se solicitó la ayuda de la Comisión de Ecología y Desarrollo Sustentable del Estado de Sonora (Cedes) para capacitar a las personas que trabajan en este huerto, así como a personas de Punta Chueca interesadas en cultivar.
“Nuestro plan a futuro es tener un huerto grande y aprender más sobre cultivar para poder ayudar a las personas que quieran tener su propio huerto; me encantaría que más personas tuvieran la oportunidad de tener un huerto, porque así tendrían una alimentación más sana”, destacó.