La informalidad en Sonora mantuvo un repunte durante el 2022, debido a la falta de solvencia de empresas, por lo que han mantenido a varios trabajadores sin registrarlos en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Luis Núñez Noriega, economista y especialista en Desarrollo Regional por la Universidad de Arizona, mencionó que de acuerdo a datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), del segundo al tercer trimestre del 2022, la tasa de informalidad en Sonora pasó de 38.3 a 39.7%.
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“Estamos hablando de 1.4 de diferencia hacia arriba, del segundo al tercer trimestre del año pasado, todavía no tenemos el cierre del cuarto trimestre del 2022, eso es lo que tenemos, un pequeño repunte de la informalidad, aunque no deja estar por debajo del índice nacional”, comentó.
Lo anterior se debe a las presiones que tienen las empresas para seguir cubriendo los compromisos formales del sector laboral para los trabajadores, es decir, se les ha vuelto más complicado proporcionar a sus empleados las prestaciones básicas de ley.
“Después de una pandemia, a nivel mundial, que en Sonora nos pegó con un incremento de hasta el 42% en informalidad, eso vino a meter presiones importantes; eso provocó que muchas empresas tuvieran que cerrar sus operaciones, se cerraron a nivel nacional un millón 500 mil empresas, más o menos”, agregó.
En ese sentido, el académico explicó que para muchas empresas, la informalidad resultó ser una forma de ahorrar en costos y mantenerse a flote después del pico más alto de la pandemia, por lo que buscaron llegar a acuerdos de diferente tipo con sus empleados, a fin de evitar el cierre.
“Muchísimos trabajadores aceptaron el acuerdo, otros sin aceptarlo simplemente las empresas dejaron de pagar el Seguro Social porque no lo podían pagar, ni al Infonavit u otro tipo de pasivos; eso provocó que se incrementara la informalidad, es un fenómeno que se deriva justamente de la pandemia”, dijo.
Asimismo, no se presentaron oportunidades o apoyos por parte del Gobierno para darle mayor solvencia a las micro, pequeñas y medianas empresas, así como a los trabajadores, por lo que de una manera u otra se presentaría este fenómeno.
Mientras tanto, es alta la posibilidad de que se mantenga la tasa de informalidad rondando el 40% para el último trimestre del 2022, aunque hay que esperar los resultados de la ENOE, estimó Núñez Noriega, quien aclaró que durante el 2021 la informalidad se estabilizó y el año pasado se presentó el repunte.
Por otra parte, los sectores como comercio, servicios y turismo han mostrado crecimientos importantes, así como el sector manufacturero, el cual contrata mano de obra formal de manera rigurosa, con prestaciones y compromisos formales con los trabajadores. Además, el sector agrícola realiza contrataciones por temporadas, con salarios y prestaciones de ley.
“Obviamente el pago de impuestos de todo esto contribuye a la baja informalidad, con respecto al resto del país, entonces Sonora está por debajo del promedio nacional por estas razones. No puede decirse que Sonora depende del resto del país, en México la informalidad alcanzó el 54% a nivel nacional en la última medición”, puntualizó.
Caída en generación de empleos
Todo lo anterior también se refleja en la disminución de la generación de empleos formales registrados en el IMSS, con una caída importante, pues al cierre de noviembre se tenían 27 mil 398 empleos acumulados en el año, mientras que diciembre cerró con 13 mil 882 empleos en promedio anual.
“Tuvimos una caída muy sensible y de acuerdo con el IMSS estamos bajos respecto a la meta que debe tener un estado como Sonora, que es de 27 mil empleos en promedio anual. De acuerdo con la organización México, ¿Cómo Vamos?, Sonora debe estar registrando 27 mil empleos anuales y cerró 2022 con 13 mil 882 empleos, más o menos a la mitad de eso”, agregó Núñez Noriega.
Mientras tanto, en marzo del 2022 se anunció que Sonora había alcanzado el primer lugar nacional en producción de empleos, pues durante febrero se generaron alrededor de 12 mil 515 empleos formales, lo cual se debe a la estacionalidad en trabajos como el sector agrícola.
“Sonora es un productor agrícola importante, particularmente en productos de alto valor e intensivos en mano de obra, como la uva de mesa, el espárrago, sandía, melón, chile, etcétera; todos estos productos requieren una cantidad impresionante de mano de obra y son estacionales, se cosechan en ciertos meses del año, eso hace que se contraten a miles de trabajadores de todo el país de manera temporal”, detalló.
En ese sentido, es de esperarse que la generación de empleos sufra de este tipo de repuntes, considerando la temporalidad de los empleos en el sector primario, mientras que se espera que el sector manufacturero, donde los empleos son más estables, se generen alrededor de 15 mil empleos formales para este año
Además, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el desempleo en Sonora cerró el año pasado con 2.6 %, mientras que para el 2021, la cifra fue de 3.2%.
¿La informalidad es desleal?
A pesar del panorama que afronta un importante número de personas, muchos optan por la informalidad para lograr sobrevivir, sin embargo, para la Cámara Nacional de Comercio en Pequeño (Canacope) en Hermosillo, este tipo de trabajadores representan una competencia desleal.
Martín Zalazar Zazueta, presidente del organismo empresarial, afirmó que los comercios constituidos pagan impuestos y hacen aportaciones, mientras que los informales solamente obtienen un permiso, en la mayoría de los casos, lo cual aprovechan para dar sus productos a precios más bajos, afectando a los establecimientos formales.
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Ante esta situación, el líder del gremio empresarial solicitó a las autoridades de los tres órdenes de gobierno a actuar en consecuencia, ya que la clientela que obtienen muchos vendedores informales es a costa de ubicarse a las afueras de establecimientos formales.
“Para que detengan el crecimiento del ambulantaje y las diferentes modalidades existentes del comercio informal, ya que ello vulnera los derechos de consumidores y trabajadores, inhiben la recaudación de impuestos y representan focos de contagio”, señaló.
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