Lengua seri: avances y desafíos de su escritura

Aunque la lengua seri o cmiique iitom tiene una historia de miles de años, su versión escrita tiene apenas poco más de cinco décadas

Stephen A. Marlett *

  · viernes 26 de julio de 2019

Ilustración: Ishus

Aunque la lengua seri o cmiique iitom tiene una historia de miles de años, su versión escrita tiene apenas poco más de cinco décadas. El desarrollo de esta modalidad ha cursado distintas etapas: desde la transcripción de audios con máquinas de escribir hasta su uso en redes sociales de Internet y en la elaboración de aplicaciones para teléfono celular. Los avances en la escritura han traído como consecuencia el surgimiento de escritores de la propia comunidad que en su haber cuentan ya con publicaciones académicas sobre lengua y cultura. En esta cuarta y última parte de la serie con motivo del Año Internacional de las Lenguas Indígenas se reseñan los pasos más significativos en la historia de la escritura de la lengua de los comcaac.

Si bien antes de los años setentas existieron algunas publicaciones en seri, incluyendo cartillas y un vocabulario, fue en esa década cuando los lingüistas estadounidenses Edward y Mary Moser publicaron dos colecciones de historias y leyendas en la lengua para su uso en la comunidad. Eran textos grabados y luego transcritos, en una época en la que el trabajo se hacía sin electricidad, con máquinas de escribir. Representar la lengua ortográficamente bien en esta modalidad era un reto para todos. Los libros producidos durante este periodo tuvieron poco alcance en las comunidades seris, aunque hubo algunos lectores.

Un poco más tarde se iniciaron algunos cambios en la representación de las palabras que resultaron en una forma escrita más fácil, tanto para escritores como para lectores. Esos cambios dieron fruto cuando se formó un grupo de personas para desarrollar la obra “Comcaac quih yaza quih hant ihiip hac: Diccionario seri-español-inglés” a base de datos recolectados durante más de cuarenta años en papelitos organizados en cajones. El diccionario fue publicado en 2005 por la Universidad de Sonora y Plaza y Valdés Editores. En 2010 salió una segunda edición como parte de la llamada Colección Bicentenario.

EL SURGIMIENTO DE ESCRITORES
Durante el proceso de elaboración del diccionario, varias personas de la comunidad comcaac empezaron a usar la lengua escrita más que antes. En 2007, tres de ellos: Lorenzo Herrera Casanova, Xavier Moreno Herrera y René Montaño Herrera empezaron a escribir ensayos para una colección que cubría diversos temas culturales. Una pequeña edición del libro fue distribuida en la comunidad.

Los escritores seris han obtenido experiencia y confianza gracias a la publicación de libros con ayuda de becas del National Science Foundation y el Christensen Fund, de los Estados Unidos, y la participación del Instituto Lingüístico de Verano. De hecho, los tres autores mencionados en el párrafo anterior, aportaron escritos de mucha importancia cultural e histórica a un volumen de literatura publicado por la University of Nebraska Press.

En 2014, los escritores aludidos y otros, entre los que destacan Óscar Perales Torres y Ana Bertha Molina Romero, contribuyeron a un volumen compilado por Carolyn O'Meara y editado por la UNAM, acerca de los vientos, sin traducción al español, que posiblemente fue el primer volumen de esa naturaleza publicado por esa institución. Algunas de esas contribuciones fueron escritas directamente por los autores; otras fueron transcritas de grabaciones en audio.

Más recientemente, jóvenes de ambos sexos participaron en un proyecto de documentación cultural y de capacitación patrocinado por el Christensen Fund y el Instituto Lingüístico de Verano, produciendo más libros para uso en la comunidad sobre temas de la naturaleza y la cultura.

LA DIFUSION DE LA ESCRITURA
La escritura se ha extendido a algunos espacios públicos en las comunidades seris, aunque pocos. Se ha usado cmiique iitom en un cartel en la playa para avisar que se está protegiendo la naturaleza, el nombre comcaac aparece en la bandera de los seris (y también en el Museo Comcaac en Bahía de Kino), y el nombre Tahejöc (isla Tiburón) aparece en la pared de una tienda de abarrotes en Socaaix (el nombre autóctono para el pueblo de Punta Chueca). Otros ejemplos de uso correctamente escritos de la lengua aparece en los nombres de los grupos de rock Hamac Caziim y Xeecoj, así como en el evento cultural Xepe Án Cöicoos.

En estos últimos años se ha visto que la forma escrita ha llegado a un punto relativamente estable y accesible. Con alguna capacitación (siempre necesaria, como en cualquier cultura), una persona puede llegar a leer con fluidez, y, con enseñanza y práctica, a escribir. Sin embargo, no existe apoyo institucional para los escritores o los que podrían ayudar a otros a leer y escribir.

Es fácil, pero erróneo, pensar que cualquier hablante de una lengua pueda escribirla con facilidad. En primer lugar, la instrucción es necesaria para saber dónde dividir la oración en palabras; no es tan sencillo hacer eso, sobre todo si uno va escribiendo sílaba por sílaba. En segundo lugar, como hemos visto, el cmiique iitom es una lengua con un inventario de sonidos significativos tan diferentes del español que ha requerido un sistema de símbolos adecuados diferentes de los del español. Hasta una palabra sencilla como cama (un tipo de pez raya) se pronuncia muy diferente de la palabra ‘cama’ en español, a causa de peculiaridades de la pronunciación del seri. El escritor principiante desconoce estas cosas, aunque su mente las tiene guardadas inconscientemente, y por lo tanto necesita, como todos, instrucción en la magia luminosa que es la escritura.

En la actualidad, una modalidad nueva para utilizar la lengua escrita ha emergido: publicaciones electrónicas. Se está experimentando con aplicaciones para los teléfonos celulares Android, las cuales permiten la combinación de texto, imágenes y audio para dar más acceso con menos costo y menos limitaciones. Se distribuyen mediante el sitio web http://lengamer.org/asoc/language.php?language=seri donde también se encuentran cuentos tradicionales, adivinanzas, información científica, relatos históricos y textos bíblicos.

Algunas redes sociales se están utilizando con fines de enseñanza para la lectoescritura y, también, se puede observar que algunos seris publican mensajes en su lengua materna. Es posible que ahora la misma tecnología que puede desviar a un joven de su patrimonio cultural pueda servir para ayudarle a recordar, proteger y hasta recuperar esa herencia. En este momento crítico en la historia de los comcaac, tal vez es a la hora justa.

*Lingüista. Doctor por la Universidad de California en San Diego. Ha investigado la lengua seri por más de cuarenta años y cuenta con un amplio cuerpo de publicaciones en la materia. Su esposa Cathy, hija de Edward y Mary Moser -pioneros en el estudio de la lengua seri- investiga la historia y etnociencia seris.a