Luego de que un grupo armado allanara el rancho de su suegro, la Gobernadora de Sonora, Claudia Pavlovich Arellano, declaró que no será necesario contar con mayor seguridad.
La mandataria indicó que "las cosas pasan" y que "hay que ponerse en manos de Dios", sin pensar en la posibilidad de estar más protegida a pesar de la cercanía familiar del caso.
"No, yo digo que las cosas pasan y hay que ponernos, pues a lo mejor suena un poco ridículo pero hay que ponernos en manos de Dios, las cosas pasan o no pasan y no necesito ya más seguridad, ya es suficiente, eso creo yo", expresó.
El domingo pasado la Fiscalía General del Estado y la Secretaría de Seguridad Pública capturaron a nueve personas que pudieran estar relacionados con el allanamiento del rancho Las Norias, propiedad del ganadero Sergio Torres Serrano.
Asimismo se realizaron dos cateos en la colonia Montecarlo y se aseguraron diversos indicios, como armas, cartuchos y droga.