El combate a las adicciones y al tráfico de drogas debe ser de manera conjunta entre Estados Unidos y México, con programas en los que verdaderamente se tenga una colaboración bilateral, apuntó Krimilda Bernal Hoyos.

Sobre la recién anunciada Operación Plaza Spike, por parte de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP por sus siglas en inglés) en Nogales, la directora del Observatorio Sonora por la Seguridad dijo que se trata de una acción importante, por lo que esperan se ataquen las causas, así como la captura de quienes están a la cabeza de las bandas del crimen organizado, proceso que se debe de hacer por ambos países, ya que uno solo nunca podría detenerlo.

Manifestó que es de relevancia que se capturen a los responsables de esos delitos, sin embargo, se requiere de una verdadera cooperación entre ambas nacionales, donde se presenta el problema de las adicciones.

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“Así como en este momento Estados Unidos está poniendo de su parte, esperemos que México y Sonora también lo hagan, a fin de que dicho plan se tengan buenos resultados, pero es importante también que se apliquen políticas de persecución criminal”, expresó.

En ese sentido, México también debe de establecer mejores operaciones de persecución, sobre todo en las regiones fronterizas, al ser los puntos más relevantes de tráfico de drogas, armas y personas, por lo que estarán pendientes de los resultados de este programa de la CBP.

Señaló que, desde lo local lo importante es aplicar más medidas de prevención a las adicciones, a fin de evitar su consumo, en este caso del fentanilo y otras drogas, por los riesgos que provocan.

“Para ambos países, y sobre todo para México, es importante que estos programas funcionen, sin embargo, también se requiere de voluntad de las autoridades”, expuso.

Por su parte, Marco Paz Pellat, vocero del Comité Ciudadano de Seguridad Pública de Sonora, agregó que realmente se requiere del apoyo de Estados Unidos, y no sólo anunciar programas que van a implementar.

Agregó que, el vecino país además debe de apoyar con tecnología y material, como es equipo aéreo que realmente sirva para atacar este fenómeno social en la frontera de Nogales.

Expuso que es grave que se mencione que por Nogales se decomise el 60% del fentanilo que busca llegar a Estados Unidos, por lo que es necesario unificar esfuerzos con México.

“Se trata de un problema complejo que se presenta en la frontera, por lo que Estados Unidos no solo debe de anunciar ese tipo de programas, sino también actuar con todo el equipo tecnológico que se requiere, como pueden ser la utilización de helicópteros”, enfatizó.

El vocero del Comité externó que el programa debe tener además mayor claridad de acción y sobre todo permanencia para que pueda tener buenos resultados.

Detener fentanilo, principal objetivo de la Operación Plaza Spike

En la frontera entre México y Estados Unidos, los decomisos de fentanilo, droga sintética altamente adictiva y a la vez mortal, han crecido durante los primeros meses del 2024, de acuerdo con información de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés), donde la ciudad de Nogales, Sonora, ha sido un punto importante para dichos decomisos.

Con el anuncio del lanzamiento de la Operación Plaza Spike, la CBP informó que, desde el comienzo del año fiscal 2024 hasta el final de febrero, se han asegurado más de 100 mil 697 kilos de diferentes drogas, de las cuales, 3 mil 628 kilos fueron de fentanilo, a lo que se añade el aseguramiento de mil 600 armas de fuego y cerca de 200 mil cartuchos de municiones.

Aunado a ello, la instancia estadounidense resaltó que el objetivo de la Operación Plaza Spike, es la búsqueda y detención de Sergio “N”, alias “El Gigio”, señalado como el jefe de plaza en Nogales, Sonora, por el Cártel de Sinaloa, quien es presunto responsable del 44% del fentanilo decomisado que iba hacia Estados Unidos, por lo que este es punto que concentra el mayor flujo de dicha droga sintética hacia la nación de las barras y las estrellas.

Al respecto, cabe recordar algunos de los aseguramientos más importantes de esta droga durante los últimos meses, como el que se dio a conocer el pasado 1 de febrero, en la garita comercial Mariposa en la frontera entre Nogales, Sonora, y Nogales, Arizona, agentes migratorios decomisaron 2.1 millones de pastillas de fentanilo ocultas en un camión de pasajeros, precisamente en el tanque para agua, en las defensas y debajo del baño del camión.

Asimismo, el 21 de enero del año en curso, los oficiales migratorios aseguraron 131 mil 340 pastillas de fentanilo, 31.4 kilogramos de metanfetaminas, 2.4 kilos de cocaína y otros 1.7 de heroína, ocultos entre las puertas y el piso de un vehículo; mientras que el domingo 25 de enero, se incautaron 76 mil 780 píldoras azules y otros 30.9 kilos de metanfetaminas, encontrados escondidos en los paneles traseros y dentro del neumático de refacción de un automóvil.

Para el miércoles 6 de marzo se reportó otro aseguramiento de la CBP, pues al inspeccionar un vehículo de carga los elementos migratorios detectaron más de 300 mil pastillas de fentanilo y 41.7 kilos de cocaína, el cual fue ubicado en el chasis de un remolque de plataforma.

Mientras tanto, entre el 7 y el 23 de marzo, la CBP decomisó 989 mil 280 de pastillas de fentanilo en diversos cargamentos dirigidos hacia Estados Unidos, mientras que, en 12 casos separados, se incautaron 4.4 kilogramos de dicha droga sintética en polvo, así como 72.5 kilos de cocaína, 233.6 de metanfetamina y un kilo de heroína, ocultos en rieles de trenes, cortafuegos, asientos, puertas, neumáticos, cerámica, adoquines de concreto, entre otros escondites.

Para el 8 de abril, las autoridades migratorias de Estados Unidos reportaron que en cuatro días, entre el 26 y 29 de marzo, se incautaron más de 1.1 millones de pastillas de fentanilo en las garitas de Nogales, siendo que en el primer día se decomisaron un total de 166 mil 270 píldoras azules con el escrito “30-M” (como es conocida esta versión de la droga fabricada por los cárteles de la droga), las cuales iban cultas en un horno microondas; dos días más tarde se hallaron envoltorios de plástico con 661 mil 50 píldoras similares y 1.7 kilos de metanfetaminas en una casa inflable, mientras que al día siguiente se localizaron 362 mil 700 píldoras de fentanilo escondidas en las paquetes de plástico dentro de las puertas y la carrocería de un vehículo.

La Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés), estima que cada kilogramo de fentanilo puro que llega desde China tiene un valor de entre 3 mil 300 y 5 mil dólares, aunque los cárteles de México pueden llegar a rebajar cada kilogramo puro para obtener entre 16 y 24 kilos, lo que multiplica las ganancias de crimen organizado.

Con información de Gustavo Moreno.

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