La sobreexplotación y alta demanda de agua ha provocado un déficit en la disponibilidad del recurso hídrico en Hermosillo por lo que el Gobierno del Estado contempla la construcción de al menos tres presas, que de acuerdo a especialistas no tendrían beneficios hasta en ocho años.

Durante su informe, el gobernador Alfonso Durazo Montaño informó que sigue en pie el proyecto de crear tres presas sobre el Río Sonora y San Miguel, así como mejorar la estructura de la presa El Molinito para eficientar la disposición del líquido vital, especialistas analizaron su viabilidad.

Para ello se invertirán alrededor de siete mil millones de pesos que forman parte del Plan Hídrico Estatal que garantizará el abasto de agua por 30 años más para Sonora.

Al respecto, el investigador del Colegio de Sonora en materia hídrica e integrante de la Mesa del Agua de la asociación Hermosillo, ¿Cómo Vamos?, Nicolás Pineda Pablos, señaló que el proyecto es para asegurar el abasto del vital líquido para la capital del Estado.

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“El proyecto tiene sentido si lo que se busca es almacenar agua en Hermosillo, lo cual será rediseñando la presa El Molinito que es de almacenamiento como punto de partida, para después recargar los mantos acuíferos”, expresó.

En ese sentido, explicó que al convertir la presa El Molinito para almacenamiento y no de contención, se lograría retener más recurso y ayudaría a la filtración del acuífero, lo cual se convirtió en una necesidad en la actualidad.

Mencionó que por tal motivo para que esta obra sea de almacenamiento, se requiere aguas arriba en el Río Sonora otra obra hidráulica para que haga la función de contención y por ende evitar problemas con las grandes avenidas.

“Esta obra de retención, puede ser en Sinoquipe, o bien en las conocidas Las Chivas en San Miguel de Horcasitas, lo cual es todo un sistema de dos presas de contención y una de almacenamiento”, enfatizó.

Pineda Pablos agregó que en la parte del Zanjón no hay viabilidad de la construcción de una presa por las condiciones en las que se encuentra, sobre todo a que también siga fluyendo el recurso de manera directa a la presa Abelardo L. Rodríguez, donde se busca rescatar algunos terrenos aledaños, sin embargo se requiere de mayores estudios sobre la función ecológica.

Aclaró que la obra de Abelardo L. Rodríguez no se puede suprimir en su totalidad, pero sí reducir en algunas áreas periféricas, ya que se requiere para el almacenamiento del agua que pueda llegar y de esa forma evitar inundaciones en la ciudad.

“Bueno sobre la factibilidad financiera para estas obras va a depender del presupuesto del estado, sabemos que tiene un 82 mil millones de pesos para este año, y las presas podrían costar hasta más de seis mil millones de pesos, entonces creo que será la Secretaría de Hacienda quien determine si tiene los recursos para estas obras o de dónde podrían salir esos recursos estatal o préstamos de instituciones”, estableció.

El investigador dijo que además se tienen que hacer estudios ecológicos, para ver los pros y contras de estas obras, junto con los beneficios sin tener que hacer acueductos, sobre todo cuando ya hay en diferentes municipios del Estado.

“Ese tipo de proyecto no son a corto plazo, sino a cuando menos a unos 8 años, lo cual implica que no se tendrán los beneficios esperados para el próximo año”, resaltó.

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Impacto en el medioambiente

Parte del proyecto revelado por el Gobierno del Estado también tiene en consideración la venta de una fracción del terreno de la presa Abelardo L. Rodríguez para la financiación de la construcción del sistema de presas.

Debido al impacto que esto podría generar en el medioambiente, activistas han expuesto la baja viabilidad de las obras, por ello Isabel Dorado Auz aseguró que se debe pensar en las afectaciones que este tipo de proyectos causan a los ecosistemas más que en el valor comercial de los negocios.

El integrante del colectivo Ciudadanía Activa Sonora compartió que de llevarse a cabo dicho proyecto existe impacto para plantas y animales de la zona, ya que ese lugar se ha convertido en un área de descanso para distintas especies de aves migratorias para las cuales el Humedal de la Sauceda no se da abasto por sí solo.

“Parece totalmente incorrecto que se esté planteando esa situación, simple y sencillamente el gobernador habla del valor comercial de los terrenos de la presa Abelardo L. Rodríguez y se le olvida el valor ambiental de esta”, platicó.

El ambientalista opinó que si se plantará vegetación en esa zona, el vaso de la presa pudiera ser un pulmón para la ciudad de Hermosillo, ya que como lo ha mencionado la autoridad, esta cuenta con un déficit estimado de un millón de árboles.

Esta acción a la larga se convertiría en un potencial económico ya que esto atraería el turismo a dichos lugares, similar a lo que hizo el Gobierno Federal con el Lago de Texcoco, es decir recuperarlo y ponerlo al servicio de la ciudadanía, continuó

“Es más o menos repetir lo que hizo Manlio Fabio Beltrones con la zona del Vado del Río, no tiene ningún sentido lo que hizo Beltrones en aquella época y no tiene sentido lo que plantea el gobernador en este momento”, agregó.

Por su parte, Sergio Müller, coordinador de estrategia de Caminantes del Desierto A.C. advirtió que desde la perspectiva ambiental este sería un desacierto, ya que la presa funciona como una zona de descanso para distintas especies de aves.

Apuntó que este depósito del vital líquido también funge como un enfriador naturalizada la ciudad, donde se estima que haya pérdidas del 50%, por lo que no tiene caso invertir en otras soluciones mientras no se atiende el problema de fondo.

Respecto al agua, aclaró que hay temas más urgentes como la reparación del sistema de conducción de agua dentro de la ciudad, ya que en este se pierde el 50% del recurso, por lo que no tiene sentido buscar nuevas soluciones si no se atiende ese detalle.

Para finalizar, puntualizó que se debe considerar el tipo de suelo con el que cuenta la zona, ya que son fangos de muchos años donde es difícil y costoso construir, por lo que primero habría que ver si hay desarrolladores interesados debido a su costo de inversión.

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