Una de las mayores dificultades que puede enfrentar una persona que ha decidido adoptar hábitos alimentarios más saludables, ya sea al modificar completamente su dieta, integrar paulatinamente alimentos naturales e integrales o comenzar a disminuir la ingesta de “alimentos chatarra”, es complementar su alimentación con refrigerios o colaciones también más saludables. Hoy te ofrecemos una excelente opción: los frutos secos.
Comercialmente es común encontrar productos a la venta que son mezclas de diversas oleaginosas como la nuez pecanera, nuez de la India, pistache, avellana, piñones y semilla de girasol o de calabaza, entre otros; a esta combinación podemos llamarle frutos secos.
Esta es una opción que, además de deliciosa, es muy saludable, ya que representa una excelente fuente de ácidos grasos omega 3 y 6, fitoesteroles y tocoferoles con actividad de vitamina E. El contenido de ácidos grasos saludables como el omega 3 y los fitoesteroles puede ayudar a disminuir los niveles de lipoproteínas de baja densidad (LDL, por sus siglas en inglés), popularmente conocido como “colesterol malo” y proteger del riesgo cardiovascular.
De acuerdo a Gustavo González Aguilar, profesor de la Coordinación de Tecnología de Alimentos de Origen Vegetal del Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD), la vitamina E es uno de los principales antioxidantes presentes en estos frutos, la cual, al igual que otros antioxidantes, ayuda a contrarrestar el envejecimiento, principalmente el asociado a los radicales libres.