Luego de una batalla judicial, las autoridades restituyeron el predio conocido como “El Bajío”, a la empresa minera Penmont, en Caborca, Sonora.
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En un comunicado, la compañía dio a conocer que el predio en cuestión es de su propiedad, que nunca ha sido de naturaleza ejidal ni ha formado parte de la dotación de tierras del ejido “El Bajío”.
Esto, luego de que en diciembre de 2018, cinco ejidatarios de esa región, presentaran una denuncia argumentando que la empresa invadía terrenos que no le pertenecían.
Respecto de los terrenos que forman parte del Ejido “El Bajío”, Minera Penmont manifiestó que desde julio de 2013, éstos fueron debidamente entregados en depósito judicial tanto a los cinco ejidatarios, como al ejido El Bajío como comunidad, a través de sus representantes.
A su vez, la empresa mencionó en enero de 2019 que un grupo de cinco personas del ejido El Bajío presuntamente habían estado realizando actividades de beneficio de minerales de manera clandestina y peligrosa, además Edgardo Urías Serrano, superintendente de Recursos Humanos de Penmont señaló que estas personas estaban invadiendo el predio.
Urías Serrano detalló que desde el año 2002 hasta el 2005, Penmont sostuvo convenios de ocupación con el ejido El Bajío para realizar la actividad de beneficio de minerales en la zona que lleva el mismo nombre, sin embargo la actividad se extendió hasta 2013.
Posteriormente el Tribunal Unitario Agrario interpuso un recurso legal que favorecía a los cinco ejidatarios, en el que se ordenó la desocupación de un área de mil 824 hectáreas, lo cual, a su decir, se cumplió a cabalidad.
Tras ese hecho, Minera Penmont se enfocó en trabajar en la explotación de minerales en el área que jurídicamente le corresponde, pero en agosto de 2018 se detectó a varias personas ocupando una fracción del predio de la empresa, argumentando que es parte de la desocupación de las mil 824 hectáreas.
Asimismo, en enero de 2019 la minera dio a conocer que cuenta con título de propiedad del predio y no realiza operaciones en terreno alguno que forme parte del ejido El Bajío, además de enfatizar que cuenta con la titularidad de las concesiones mineras aplicables a la zona, y que toda persona física o moral distinta que realice actividades mineras en el predio mencionado lo hace de manera ilícita.
Con esto, Minera Penmont explicó que continuará realizando sus actividades mineras y defendiendo sus derechos con irrestricto apego a la ley, colaborando con las autoridades competentes en beneficio de las comunidades vecinas y del desarrollo del estado de Sonora