Este jueves, 2 de abril es el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, establecido por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) con el propósito de alertar, combatir la discriminación y señalar la importancia de un diagnóstico temprano sobre este trastorno.
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Luis Arturo Etcheagaray es un joven de 19 años con autismo, quien ha tenido grandes avances en su personalidad, gracias a sus terapeutas Ricardo y Omar, pues lo han apoyado durante un año y medio para que tenga una mayor integración con su familia.
Ricardo Muñoz López, terapeuta de Luis Arturo, lo describe como un muchacho alegre y amante de la música, a quien le gusta bastante compartir su día con las personas, poner sus canciones favoritas en el carro, ver vídeos y bailar.
“No lo veo como un muchacho aislado, aunque sí le gusta que respeten su espacio personal, a la vez le gusta acercarse a la gente, que lo abracen, que jueguen con él, que interactúen, que le hablen; normalmente paseamos todos los días, le gusta mucho dar la vuelta en el carro y escuchar a Queen, Aerosmith. Últimamente toma control de su Tablet y pone los videos que más le gusta y se pone a bailar”, contó.
Además de disfrutar sus pasa tiempos favoritos, dentro del programa es que Luis Arturo haga diferentes tipos de actividades deportivas, recreativas y académicas, las cuales le ayudan a estar ocupado todo el día y aprender cosas nuevas.
“Por las mañanas hace 30 minutos de ejercicio, corre, se le ha enseñado hacer sentadillas con eso, lanzar pelota y por la tarde es una actividad de colores para que aprenda a diferenciar colores, letras, objetos del uso cotidiano, como un tenedor, cuchara y así que los sepa diferenciar. También lleva actividades de pintura y recreativas”, mencionó.
Entre otras de las actividades cotidianas, es visitar un terreno ubicado en San Pedro, donde Luis Arturo aprende a darle mantenimiento a las plantas, hacer surcos y regar.
“Cuando me apoya, después puede hacer una actividad que le divierta, como utilizar el brinca brinca, le gusta mucho saltar, se ríe, lo disfruta, es como su recompensa. Dentro de las mejorías que ha tenido es que no podía hacer muchas cosas por sí mismo, como ponerse su ropa, abrir una bolsa de Sabritas, bañarse apropiadamente, pero ahora todo eso ha logrado y aprendido, obviamente siempre hay que estar al pendiente”, agregó.
Cuando ambos terapeutas lo conocieron, Luis Arturo era sumamente agresivo, por lo que no seguía instrucciones, como llevar su plato a la mesa, pues detonaba con facilidad y comenzaba a gritar, se hacía daño o lastimaba a otra persona.
“Poco a poco ese tipo de reacciones se han ido controlando, al punto que ahorita tenemos bastantes meses sin una reacción de estas. Ahora le puedo decir que levante su planto, que se sirva un vaso con agua, que haga una tarea con excelente actitud porque sabe que puede hacerlo bien sin tener que reaccionar de esta manera”, detalló.
El joven ha tenido un gran avance, pues actualmente puede interactuar con mayor facilidad con sus papás, atacar órdenes sin algún problema o pasar una noche con ellos sin apoyo de los terapeutas.
“Sus padres por lo general han tenido comentarios muy positivos de lo que es Luis ahora, en un principio para ellos era un poco complicado el volver a interactuar con él porque pasaron por cosas difíciles, entonces cuando comenzamos era un poco de temor el que notábamos en ellos para acercarse a Luis y pedirle algo, ahora puede pasar horas sin ayuda de terapeutas en su casa”, precisó.
“Cada joven con autismo es diferente, lo que veo en Luis es que es un muchacho feliz, muy contento, normalmente siempre busca jugar, interactuar, lo saco con mi familia, con mi pareja, con mis amigos y siempre está buscando su atención, que pasen tiempo con él y que jueguen”, puntualizó.
Finalmente, considera importante que cuando una persona autista se encuentra en un momento de crisis, lo mejor que pueden hacer es no hostigarla, ni molestarla, simplemente compartir tiempo con ella.
