Por la mañana de este domingo una familia visitó la tumba de su familiar difunto en el Panteón Municipal, conocido como “Las Manitas”, donde se encuentra el hijo del señor Martín Alvarado, quien reportó en redes sociales que la tumba de su niño le habían robado la lápida.
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Martín Alvarado Parra contó que, lamentablemente, la lápida de su hijo “Tadeito”, quien falleció hace cinco años, fue hurtada este fin de semana, por lo que considera que se encuentra instalada en otra tumba del panteón.
“El domingo por la mañana fui temprano a la tumba de mi hijo y vi que ya no tenía la lápida, pero un indigente se acercó conmigo y me dijo que al parecer la tiene una tumba de una señora que está entrando a mano derecha, la tercera tumba. Vi que pusieron un azulejo de color café con el nombre de la señora que falleció hace un año, tengo dudas, pero siento que sí es la de mi hijo Tadeo”, contó en entrevista con El Sol de Hermosillo.
Asimismo, solicitó al jefe de panteón el nombre de los dueños de dicha tumba, a fin de pedir permiso para revisar la lápida y saber si efectivamente es la de su hijo.
Ante este robo, Martín Alvarado comentó que para el año entrante cambiará los restos de su pequeño a un nicho, por el mismo daño y falta de respeto que hay en el lugar.
“Me cobran 5 mil pesos para que me vuelvan a hacer el mismo trabajo, pero mejor el año que viene quiero llevar a mi hijo Tadeo a un nicho, porque le hacen mucho daño. Soy taxista y siempre que paso por el panteón veo a cholos que se atraviesan la barda, no hay seguridad”, dijo.
El padre de familia recordó que la hermana de su esposa visitó la tumba de Tadeo la semana pasada para dejarle un arreglo floral, pero todavía se encontraba la tumba en buen estado.
También considera que entre los familiares que visitan a sus difuntos podrían realizar un grupo y contar con horarios para turnarse y cuidar ciertas áreas.
Para finalizar, Martín hace un llamado de manera urgente a las autoridades correspondientes para solicitar rondines diarios en los panteones para evitar este tipo de situaciones, asimismo menciona que el haber robado la lápida de su hijo fallecido es una falta de respeto para toda la familia.