Este año los servicios de salud mental en Sonora presentaron afectaciones por la falta de recursos federales, aunado a la contingencia sanitaria que trasladó las atenciones al formato digital.
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Este año el Gobierno federal redujo 82% los recursos destinados a las entidades para atender el tema de salud mental de la población, en específico fueron 12 estados los que no recibieron recursos por la Federación este año, entre los que se incluyen Sonora.
Para poner un referente, Sonora tuvo durante el año pasado un recurso de aproximadamente 280 mil pesos del Gobierno de la República para la atención de personas con problemas mentales en instituciones públicas, quienes a día de hoy se encuentran haciendo su mayor esfuerzo para salir adelante.
Juan Manuel Tong Payán, director general de Salud Mental y Adicciones en el Estado, confirmó que hasta la fecha Sonora no ha percibido ningún peso de este recurso y el Gobierno estatal ha asumido más gastos.
"En el programa específico de salud mental estamos recibiendo 280 mil pesos, este año no han asignado ni un solo peso, el recursos de todas maneras es mínimo", externó.
Debido a que el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), todavía no asume la compra consolidada de fármacos, la Secretaría de Salud del Estado aporta recursos para los medicamentos, pero se requieren más.
Esto ha orillado a que los familiares de personas con padecimientos psiquiátricos tengan que buscar, en medio de la crisis económica y laboral, otras alternativas para poder tener los tratamientos adecuados, como acudir a un particular.
Se cambian con particulares
Un ejemplo de ello es el caso de Estefanía Sánchez Navarro, quien además de ser paciente lleva a su hijo Jezza a atención psiquiátrica; desafortunadamente el último año ha sido crítico para la familia, pues han sido testigos de la falta de servicios y la necesidad de más recursos.
“Nosotras decidimos salir de la atención del Hospital Nava porque en realidad dejaron de surtir los medicamentos, son muy caros por ser medicamentos controlados y se volvió complicado, además con el cambio del Seguro Popular al Insabi”.
Estefanía comentó que durante la pandemia fue muy complicado obtener medicamentos, ya que había que hacer toda una peregrinación para conseguirlos “en algunas ocasiones nos permitían surtir medicamentos sin el papeleo correspondiente por la pandemia, pero luego comenzaron a ponerse estrictos y dejaron de surtirnos el medicamento y además cuando lográbamos acceder de manera fácil, digamos, no había, siempre faltaba alguno y eso implicaba dar vueltas a farmacias y centros psiquiátricos”.
Para la joven los fármacos no sólo fueron un problema, sino que la falta de atención también fue un motivo para que optaran por cambiarse a los servicios de salud mental privados “durante la pandemia tuvimos algunas situaciones muy urgentes de atención para él, casi siempre en domingo, en el Hospital Nava nos negaron el servicio, nos dijeron que sólo había atención psiquiátrica de emergencia en el área de adicciones, mientras que de adolescencia no había y esto ocurrió tres veces”.
En una decisión familiar, Estefanía y su esposa Ivonne Luna, decidieron cambiarse al servicio privado, ya que además de Jezza, hay dos pacientes más dentro del núcleo familiar, lo que representa un gasto mensual de 7 mil 500 pesos por atención psicológica y psiquiátrica.
Pierden dar relevancia
Para el abogado y defensor de los Derechos Humanos, Miguel Ángel Haro, la suspensión de los recursos durante este año tiene mucho que ver la priorización de enfermedades “priorizan la parte del Covid-19 para no tener problemas dejando de lado lo demás y resulta que se forma una bola de nieve, resultando que las enfermedades mentales sí existen”.
Los casos de depresión durante el 2020 sumaron un total de mil 903, mientras que de los otros padecimientos no se tienen cifras exactas hasta el momento por parte del Sector Salud a nivel estatal.
En este sentido, Miguel Ángel Haro, destacó que las autoridades de salud no dan a conocer cifras reales de los múltiples trastornos que existen por cuestión de prejuicios.
“En la Secretaría de Salud no dan a conocer cifras de personas con bipolaridad, esquizofrenia, trastornos múltiples de personalidad, en fin, muchos trastornos que existen y no los tiene Sonora, porque son nuevos y nuestro Estado, hasta eso, es conservador para reconocer enfermedades mentales”, externó el defensor de los Derechos Humanos.
Sonora se capacita
Juan Manuel Quijada Gaytán, director general de los Servicios de Atención Psiquiátrica de la Secretaría de Salud federal, mencionó que en Sonora, así como en el país, existe un rezago en tema de Salud Mental.
Por ello, en el Estado comenzaron desde hace algunos años con la capacitación al personal de primer nivel, lo que ha hecho que Sonora se ubique en los primeros cinco con elementos preparados.
Dijo que con ello, desde el Gobierno de la República pueda trabajarse en un modelo preventivo de enfermedades mentales.
“Si bien hay que atender a todos los que tengan un padecimiento, a día de hoy buscamos modelos preventivos y Sonora ha puesto mucho interés en el último año y medio en este tema”.
Atenciones virtuales
Es por ello que la Secretaría de Salud en Sonora ha tratado de darle atención a las personas con padecimientos mentales a través de plataformas virtuales.
El secretario de Salud, Enrique Clausen Iberri, indicó que se atendió la salud mental durante la contingencia con programas y capacitaciones.
Uno es el de Atención Psicológica-Tanatológica por Covid-19, mismo que se activó en 12 municipios del Estado, con la atención de 23 profesionales que recibieron 4 mil 97 llamadas para atención.
“Las intervenciones se realizaron a través de línea telefónica, videollamadas, mensajes de WhatsApp y SMS de texto, en comunidades aisladas sin acceso a datos”, resaltó.
Con el Programa “Ponte frente al Espejo”, se han impartido más de 70 temas vía zoom, con 5 mil 656 asistencias y más de 110 mil reproducciones de las charlas vía Facebook, con un alcance de más de 14 mil 500 personas.
Expresó que se llevaron a cabo 35 talleres de capacitación a empresas, asociaciones y dependencias de manera presencial y 16 de manera virtual.
En el C5i, los psicólogos, recibieron 3 mil 104 llamadas, 2 mil 482 fueron casos en intervención en crisis y primeros auxilios psicológicos y a 319 personas se les refirió a los Centros Especializados.