Sonora cuenta con el doble más de agua almacenada que en 2022 para subsistir a un nuevo periodo de sequía que persistirá al menos por los siguientes tres meses.

El año anterior, el estado vivió dos situaciones extremas, una grave crisis de estrés hídrico con los niveles más altos de sequía que concluyó tras una intensa lluvia que provocó severas inundaciones que causaron la muerte de 13 personas.

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Estas precipitaciones lograron recargar el sistema de presas de la entidad a un nivel que para el corte del 15 de marzo garantiza un 47.4% de agua almacenada en 10 diques que distribuyen el recurso en territorio sonorense, de acuerdo a la Comisión Nacional del Agua (Conagua).

Datos del Organismo de Cuenca Noroeste (OCNO) de la Conagua detallan que son 4 mil 092 hectómetros cúbicos de agua (hasta el 15 de marzo), los que se tienen en las presas de la entidad, mientras que hace un año eran alrededor de 2 mil 013 hectómetros cúbicos.

Esto representa más de lo que se tenía en la misma fecha, pero de 2022, antes de que iniciara el periodo de estiaje o el más seco, es decir, en el que se registran menos lluvias durante el año y que abarca de marzo a junio.

Aunque la dependencia señaló un abasto de agua para estos meses de estiaje debido a las pasadas lluvias, se carece de un pronóstico certero para determinar tanto la temperatura como la cantidad de lluvia que se presentará este verano, lo que genera también incertidumbre.

“Cuando y mucho se puede tener un pronóstico para dos a tres meses, pero en sí para el verano de lluvias y temperaturas no lo hay, sin embargo, sólo se está entrando al período seco anual, ya que, de marzo a mitad de junio, no llueve por lo que ese es el panorama que se puede tener”, expresó.

La presa Lázaro Cárdenas conocida como “La Angostura” es la que cuenta con más almacenaje, de acuerdo a su capacidad, ya que está al 94.9%, le sigue la Abraham González, que suministra agua al sistema del río yaqui, con 92.1%.

Por su parte, en Hermosillo, el dique Abelardo L. Rodríguez está al 4.7% de su capacidad total, en este mismo periodo de 2022 se encontraba al 0.2%, mientras que El Molinito reporta 29.5% y el año pasado tenía 15.1%.

La capital sonorense es una de las ciudades más vulnerables en cuanto a la garantía del servicio de agua en temporada de calor o verano, sobre todo el sector norte de la localidad.

Según el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, Hermosillo estuvo a dos o tres días de quedarse sin agua en los últimos años, pero por gestiones del Gobierno y las precipitaciones se evitó este problema.

Con el incremento en las temperaturas también aumenta la demanda del servicio, por lo que en la ciudad la tendencia crece hasta 40% de acuerdo a Ignacio Peinado Luna.

El dirigente de la Unión de Usuarios, organización que apoya a la población vulnerable con gestiones en los servicios básicos como electricidad y agua, expuso que cada verano se genera una incertidumbre respecto al abasto del recurso hídrico.

“Es normal que durante el verano en la parte Norte de la ciudad, se tengan problemas con el suministro, en razón de que se tiene un aumento de la demanda de hasta el 40% de los cuales un 20% son de usuarios que en sus hogares tienen un cooler, que tienen un alto consumo de agua”, externó.

Hermosillo, en riesgo de quedarse sin agua

Al respecto, Ignacio Peinado Luna representante de la Unión de Usuarios de Hermosillo, indicó que cada verano para Hermosillo se tiene una situación compleja para el abasto del agua, sobre todo en la parte norte y norponiente de la ciudad.

“Es normal que durante el verano en la parte norte de la ciudad, se tengan problemas con el suministro, en razón de que se tiene un aumento de la demanda de hasta el 40% de los cuales un 20% son de usuarios que en sus hogares tienen un cooler, que tienen un alto consumo de agua”, externó.

Por tal motivo, las obras por la que siguen abogando son el Ramal Norte y la presa El Cajoncito, con la finalidad de cubrir las necesidades de suministro y acceso al agua en toda la capital sonorense.

Recordó que el Ramal Norte por diferentes motivos políticos y económicos de varias administraciones federales, estatales y municipales, no se ha concretado, lo cual ha hecho que sigan las dificultades en ese sector de la ciudad, donde en ocasiones los ciudadanos sufren la falta del agua por varias horas, que además afecta el desarrollo económico.

El Ramal Norte contemplaba la construcción de una planta potabilizadora en un terreno de 23 mil metros cuadrados ubicado al norte de Hermosillo con una conducción de la tubería que vendría del kilómetro 10 de la carretera a Mazatán, donde está la primera estación de reducción del Acueducto Independencia que viene de la presa El Novillo.

En el caso del proyecto de la presa El Cajoncito, es una obra más viable que una desaladora como intenta hacerla el Gobierno del Estado, opinó, ya que trata de recuperar los escurrimientos del Río Bacoachi de Benjamín Hill con un recorrido de 150 kilómetros al Norte de Bahía de Kino donde está la playa de San Bartolo.

A tan sólo 40 kilómetros está el área de El Cajoncito y es donde se puede desarrollar esta presa con una altura de 350 metros sobre el nivel del mar y el agua podría llegar por gravedad tras un recorrido de 70 kilómetros con una capacidad de almacenamiento de 150 millones de metros cúbicos.

“Este proyecto de alguna forma garantiza agua de calidad y a bajo costo para todos de suministro, técnicos y facturación, sobre todo también para el norte de Hermosillo”, estableció.

Aseguran abasto para la ciudad

Para el presidente municipal, Antonio Astiazarán Gutiérrez, el abasto de agua potable está garantizado no sólo por la cantidad de agua que hay en las presas, sino por la rehabilitación de pozos y obras de infraestructura que se realizaron en la localidad.

Aunado a esto, 30% del suministro de agua de Hermosillo proviene de la presa Plutarco Elías Calles o El Novillo, que llega a la ciudad por medio del Acueducto Independencia hasta las colonias del Sur de la capital.

“Tenemos el agua suficiente en las obras, así como la del Acueducto Independencia que representa el 30 por ciento del suministro para la ciudad, además de una inversión importante para mejorar la medición en materia de telemetría y conservar de esa forma la mayor cantidad del recurso”, enfatizó.

Sobre el Ramal Norte, comentó que se tiene contemplado un análisis mediante el Diagnóstico Integral de Planeación para que de ahí se derive la Mejora Integración de Gestión con el Organismo Operador de Agua, a fin de que se tenga la mejor efectividad de suministro, pero con el apoyo del estado y la federación.

Con este tipo de procedimientos, se busca eficientar el aspecto técnico y comercial, aunado a los 45 millones de pesos que ya se aplicaron el año pasado para la sustitución de los equipos en los pozos de Agua de Hermosillo, con lo cual se busca tener ahorros en más de tres millones de pesos en el gasto de electricidad, además de la utilización de energía solar para su funcionamiento.

Dentro de las mejoras de abastecimiento y sistema de drenaje, también está lo correspondiente a la reparación de fallas de al menos 80 colapsos en distintos puntos de la ciudad y que ya están siendo atendidos.

Dijo que de antemano como parte del ahorro del agua potable para la comunidad, lo que se va hacer es un proyecto para suministrar agua tratada a las industrias de la ciudad, como es el caso de la planta Ford Motor Company.

Esto forma parte de los retos para tener agua más barata, por lo que con ello se espera ahorrar el recurso en los mantos acuíferos y atender la demanda del factor humano.

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De esa forma con los pozos que se cuenta en Hermosillo para dotar de agua a la población se tiene garantizado el abasto para este año, además de la inversión que se hizo de 45 millones para cambiar todas las bombas de los pozos, así como los 80 millones de pesos con apoyo de la Comisión Nacional del Agua para conocer por medio de telemetría cuánta agua se consume y cuánta se desperdicia.

Todo ello forma parte del plan de abastecimiento que se hace desde el año pasado por el Ayuntamiento y Agua de Hermosillo, para la rehabilitación de los pozos, donde en el 2022 se rehabilitaron 18 pozos con una inversión de 20 millones de pesos, mientras tanto, con una inversión de 45 millones de pesos se cambiarán 65 pozos con lo que se asegura el abasto del recurso de este verano y los próximos.

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