La producción, calidad y rendimiento del trigo sonorense lo ha posicionado como uno de los cultivos más valiosos no solo para la entidad, sino para el sector alimentario del país.

Las condiciones climáticas de la entidad y la tecnología han permitido que especialistas desarrollen al menos 10 variedades de semillas de este alimento en las últimas dos décadas, generando una mayor certeza en la producción de alimentos mexicanos.

De acuerdo al Patronato para la Investigación y Experimentación Agrícola del Estado de Sonora (PIEAES), estas variedades se dividen en los dos principales tipos: El harinero, utilizado para la repostería y el cristalino, empleado para pastas.

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Sonora contribuye con cerca del 80% de la producción nacional de trigo cristalino, mientras que en total aporta más del 52.4% del cultivo (incluyendo harinero) que se genera en todo el país.

Al respecto, Humberto Borbón Valencia expresó que la región con mayor producción en Sonora es el Valle del Yaqui, ya que entre el 60 y 70% de ese territorio es utilizado para el trigo.

El director del Distrito de Riego del Valle del Yaqui mencionó que este alimento es el sustento de 22 mil usuarios que conforman dicho distrito, desde productores hasta empleados, por lo que su producción es de gran relevancia para el desarrollo local. Tan solo durante 2022 el volumen que se acumuló fue de aproximadamente 7.2 toneladas de este producto, lo que generó una derrama económica de alrededor de 7 mil millones de pesos al año.

“Es tradicionalmente uno de los más importantes por su seguridad en la cuestión de la producción, es un cultivo que los productores lo tienen identificado, bien controlado, conocen al detalle las condiciones necesarias para hacer un buen cultivo con productividad”, destacó.

Actualmente son 140 mil hectáreas de trigo bajo riego en este sector. De esa cantidad, 17 mil son del tipo harinero y el resto cristalino; ambos se exportan tanto a nivel nacional como internacional.

Permisos para la siembra

De acuerdo al Comité Estatal de Sanidad Vegetal, para el periodo 2022-2023 los permisos que se otorgaron para la siembra de trigo equivalen a 253 mil 625 hectáreas en Sonora, las cuales se distribuyen en nueve regiones.

Una de las principales y que registra el mayor volumen es el Valle del Yaqui, en el sector Sur de Sonora, pues en el ciclo agrícola reciente se generan más de 143 mil 355 hectáreas de trigo.

Después de esta región, los municipios de Navojoa y Huatabampo recibieron permiso para cultivar 35 mil 746 y 34 mil 176 hectáreas, respectivamente, mientras que en Hermosillo se otorgaron autorizaciones para 3 mil 732.

Adrían López Durazo, productor de la Agrícola Américas en la costa de Hermosillo, reconoció que es un producto con grandes beneficios para el sector agropecuario, pues es de los alimentos de primera necesidad para la población.

Expresó que su alta demanda le ha permitido seguir con su producción en una región donde abundan otros cultivos, como las hortalizas, debido a las propiedades de la tierra de la zona.

“Es un excelente producto que se mantiene en producción desde noviembre a mayo; cuando lo cosechamos, nosotros no vendemos sobre todo en el Valle del Yaqui porque ahí se recopila una gran cantidad”, externó.

Panorama de cotización

Para el especialista y asesor agrícola de Crown Jewels, Javier Ruvalcaba Esquer, este año se prevé un precio favorable para los productores de trigo debido a las condiciones de frío que impactó en el mercado estadounidense y nacional.

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“El trigo es un producto que en teoría va a valer lo mismo que en 2022, en las zonas agrícola del Valle del Yaqui van a tener muy buena producción y ellos creen que a la hora de definir el contrato con el comprador se acuerda un buen precio por tonelada, se dice que es muy bueno”, compartió.

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