Habitantes del poblado Miguel Alemán coinciden en que las vialidades de terracería son la peor parte de dicha comunidad, pues frecuentemente se presentan fugas que impiden su funcionamiento adecuado.
RECIBE LAS NOTICIAS DE EL SOL DE HERMOSILLO DIRECTO EN TU WHATSAPP, SUSCRÍBETE AQUÍ
La parte final de la calle Jesús García, por ejemplo, permanece estancada de lo que, según cuentan los vecinos, es agua de drenaje y, aunque no se percibieron olores fétidos en ese lugar, los vecinos de ambas aceras permanecen separados por una laguna de lodo.
Alma, quien ha vivido en el poblado desde seis años, aseguró que este es un problema muy frecuente dentro de la población y llegó a un punto aún más complicado que la inseguridad y delincuencia de la región.
“Todo el tiempo se está tirando en las alcantarillas, en la temporada de lluvias se inunda, se mete el agua al a casa; van dos veces que sucede, todo el tiempo ha sido así. Nosotros hacemos zanjas para que pase el agua”, relató.
Estos problemas se extienden a vialidades más extensas que permanecen sin pavimentar, como la calle Las Palmas, misma en la que los ciudadanos deben quitarse los zapatos para poder desplazarse en el lodo.
Asimismo, la calle Dr. Arias Rebollo, que conduce a la casa hogar Villas del Papa Francisco, se caracteriza por sus estancamientos de agua negra, donde los drenajes pueden verse en los extremos del camino.