- Mito favorable para el partido
Hace 23 años, el asesinato de Luis Donaldo Colosio Murrietasacudió no solo a la clase política, sino a México entero yconmovió al mundo. Habían matado al candidato del PRI a laPresidencia de la República luego de un mitin en la colonia LomasTaurinas en Tijuana, Baja California, un líder en ese momento queprometía un cambio en México en lo político, social yeconómico.
El investigador de la Facultad Latinoamericana de CienciasSociales (Flacso), Nicolás Loza Otero, señala que eldesafortunado hecho de la muerte de Colosio le permitió al PRIconstruir un héroe contemporáneo, un mito favorable al institutopolítico.
Arturo Zamora Jiménez, secretario general de la CNOP, reconoceque desde Luis Donaldo Colosio y después de su muerte, lospriístas no han tenido un líder político que tenga suscaracterísticas y cualidades. María de los Ángeles MorenoUriegas, expresidenta nacional del PRI, señala que el que fueratambién líder nacional priísta dejó un vacío muy difícil dellenar en la política y el partido, así como en la democracia engeneral. “Pareciera que hubiera habido un salto y el tramo quecorrespondía, ya nunca se cubrió”.
El investigador de la Flacso, señala que al PRI le vendría muybien un líder fuerte, inteligente, con la mira bien puesta en elfuturo en términos de un programa de Gobierno, capaz de resolverproblemas de manera moderna y progresista; en tanto el líder delsector popular del PRI señala que todas las sociedades requierenlideres pero positivos, porque hay quienes en el mundo delpopulismo son líderes de alto riesgo; a su vez la exdirigentenacional del CEN del PRI señala que para líderes de la talla deColosio Murrieta hace falta educación de calidad en todos losniveles y categorías, y prepararlos para construir una mejorsociedad.
El 23 de marzo de 1994 Luis Donaldo Colosio Murrieta hacía giraproselitista por la ciudad de Tijuana como candidato del PRI a laPresidencia de la República; la colonia de Lomas Taurinas fue elescenario de su trágico desenlace. Mario Aburto Martínez ledisparó en un par de ocasiones, una de las balas le impactó en lacabeza y otra en el tórax.
Siendo candidato, el 6 de marzo de 1994, en el aniversarionúmero 65 de la fundación del PRI, Luis Donaldo Colosiopronunció un discurso que fue considerado la ruptura con elentonces presidente de México, Carlos Salinas de Gortari; 17 díasdespués del discurso, Colosio fue asesinado.
El discurso de Colosio reconoció la labor del PRI en laconstrucción de las instituciones del país, pero tambiénadmitió las graves prácticas de concentración de poder,corrupción e impunidad.
Fue un mensaje dirigido a los priístas, un diagnóstico de lostemas medulares del país, contenía propuestas para reformar elpoder y un llamado a cerrar filas para construir un proyecto denación.
“Yo veo un México con hambre y con sed de justicia, unMéxico de gente agraviada, de gente agraviada por las distorsionesque imponen a la ley quienes deberían de servirla. De mujeres yhombres afligidos por abusos de las autoridades o por arroganciasde las oficinas gubernamentales”. Éste es quizás uno de losfragmentos más significativos de ese memorable discurso.
Colosio Murrieta nació el 10 de febrero de 1950 en Magdalena deKino, Sonora. Fue diputado, senador y presidente del PartidoRevolucionario Institucional. Fue el primer secretario deDesarrollo Social en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, ycandidato a la Presidencia de México.
UN GOLPE SEVERO PARA EL PRI
María de los Ángeles Moreno Uriegas, expresidenta nacional delPRI, del 3 de diciembre de 1994 al 19 de agosto de 1995, enentrevista con El Sol de México recuerda cómo vivió el PRI elasesinato de su candidato presidencial, “para nuestro Partido fueun golpe severo del que difícilmente terminaremos derecuperarnos”.
El ambiente estaba enrarecido, las acusaciones de muy diversostipos menudeaban, la gente afuera se mostraba renuente a confiarotra vez en el PRI y las condiciones para las siguientes eleccionesse tornaron mucho más complicadas.
“De hecho creo que su muerte trastocó de manera patentenuestra vida institucional, dejó sin esperanza a muchos mexicanos,y a quienes creímos en él y lo seguimos nos trastornó la vida ylas posibilidades de trabajo de manera definitiva”, señala lalíder priísta.
Y hace evidente su sentir, al señalar que ser presidente delPRI en esas circunstancias no solo fue triste sino también enmuchos sentidos cuesta arriba. “Viví con enorme tristeza ydesencanto el que nuestro amigo y candidato hubiera desaparecido.Nada sería igual sin él”, expresa.
Sobre los ideales y el legado de Luis Donaldo Colosio, María delos Ángeles Moreno asegura que sus ideas de renovación ytransformación de los partidos y del Gobierno para servir mejor ala sociedad siguen y seguirán siendo vigentes. Su legado dehonestidad, valor, deseos de servir y de cambios sociales paraconstruir un mejor país, aún nos alientan.
“El cobarde y atroz homicidio nos recuerda que la sociedadMexicana, hace mucho, optó por una vía pacífica para alcanzarreivindicaciones sociales y que alteraciones como ésta prueban quelo único que se consigue con la violencia es más violencia, dolory daño grave para todos”, manifestó.
Aseguro que desde el asesinato del candidato presidencial, elPRI ha cambiado como parte de un esfuerzo permanente para respondermejor a las demandas sociales y afinar estrategias y propuestaspara triunfar legítimamente.
Sin embargo, no todo, desde su perspectiva, ha sido para bien,pues el partido se ha alejado de la congruencia entre su ideario ysus acciones y el pragmatismo a ultranza “nos ha alejado de latrayectoria histórica de responder a las necesidades de lamayoría de la población. Nuestra alianza con obreros, campesinosy clases medias populares se ha desdibujado y el apego de losgobiernos a un modelo económico que privilegia al capital y susganancias, ha arrastrado al partido a una situación que hace pococlara la diferencia con partidos de corte conservador”,advierte.
Estima que para generar líderes de la talla de Luis DonaldoColosio hace falta educación de calidad en todos los niveles ycategorías; imbuir nuevamente en los niños el amor a nuestrapatria, el orgullo de ser mexicanos y los valores y principioscívicos e históricos que sustenten profundamente su deseo deservir a la sociedad, alejándose de rapiña y de hurto. Serequiere una labor continua de capacitación y entrenamiento paraser servidores públicos y prepararse para construir una mejorsociedad.
COLOSIO CAMBIÓ EL MODELO DE ASAMBLEISMO
El secretario general de la Confederación Nacional deOrganizaciones Populares (CNOP) del PRI, el senador Arturo ZamoraJiménez, define a Luis Donaldo Colosio como el líder que cambióel modelo tradicional del asambleismo dentro de su partido, quelogra incorporar dentro de los estatutos y programa de acción unaserie de cosas que constituyen un legado para los priístas.
Él promovió la declaración de principios para que elinstituto político se definiera como un partido de ciudadanos, deorganizaciones sociales y de sectores; en los estatutos impulsó laafiliación individual para que no se hiciera de manera corporativay que el voto en las asambleas fuera por delegados y no pordelegaciones.
Dentro del PRI creó el Consejo Político Nacional para tomardecisiones en la generación de candidaturas a través de consultasa la base.
“Todo esto significa un gran legado que nos dejó, y eselegado sigue vigente, porque lo seguimos respetando y cumpliendo,es patrimonio del partido y es patrimonio de todos losmexicanos”, aseguró el senador por el Estado de Jalisco.
El exlíder priísta y entonces candidato a la Presidencia de laRepública fue víctima de un acto de violencia que todos lospriístas “seguimos reprobando y que seguiremos repudiando”, loque le impidió el que no lograra concluir un proyecto que teníatanto para el partido como para la nación.
Recordó aquellas voces que aseguraban que con la muerte delpriísta empezaría una descomposición del régimen políticomexicano, apostaban a que se desencadenarían actos masivos deviolencia en el país, lo que no fue así y por ello, señaló ellíder del sector popular, ha sido necesario que en México secuide a todas las figuras públicas de cualquier partido político,que reciban mayor atención, porque seguramente en aquel momentohubo descuidos, reconoció.
Se le preguntó si se corre el riesgo de que se pueda registrarotro magnicidio como el de 1994 con Luis Donaldo Colosio, suprimera respuesta fue: “toco madera, no queremos que algo de estosuceda a ninguno, ni siquiera al regidor del último municipio deeste país, ni a nadie que participe en el ámbito de lapolítica”.
Insistió que como partido político reprueba y condena laviolencia, y por esa razón el PRI demanda a las autoridades detodo el territorio nacional que haga su labor de prevención afavor de cualquier aspirante, de cualquier candidato, hombre omujer, joven, grande o del tamaño que sea.
Recordó que la muerte de Colosio Murrieta no solo fue unadesgracia para sus amigos, su familia, para una clase políticavigente, muy fuerte, sino que dejó un vacío, se perdieron valorespolíticos de hombres y mujeres. Esta desgracia, añadió, tambiénsignificó un daño muy fuerte a gran parte de la clase políticapor la incertidumbre que esto generó en su momento.
“Debemos reconocer que desde entonces a la fecha no hemostenido un líder político que tenga las características ycualidades de Luis Donaldo Colosio. No lo hemos tenido porque losperfiles personales y las trayectorias de la clase políticacontemporánea también son distintas”.
Aseguró que el que fuera candidato presidencial sigue siendopunto de referencia para los priístas, un compromiso para seguirmanteniendo la responsabilidad política que supone la estabilidadsocial, económica, la competitividad de México, la unidad de losmexicanos frente a la deportación de mexicanos que están enEstados Unidos o el muro, que rechazamos ambos.
“Todas las sociedades requieren liderazgos, pro liderazgospositivos; no nos equivoquemos, hay quienes en el mundo delpopulismo creen que son líderes y creo que son líderes de altoriesgo y son líderes que no contiene la positividad que demanda lasociedad hoy en día”, advirtió.
Aseguro que el PRI está hecho de liderazgos, locales,regionales y nacionales muy sólidos, y cada uno de ellos con suspropias características; el PRI, como cualquier partido político,tiene sus puertas abiertas para recibir a cualquier persona que seafilie, lo que hacemos es permitir que cualquier persona, mujer uhombre que tenga capacidad y buena intención social puedaproyectarse como liderazgo.
AL PRI LE HACE FALTA UN NUEVO LIDERAZGO
Para el investigador y profesor de la Flacso, Nicolás LozaOtero, el asesinato de Luis Donaldo Colosio evidenció ladescomposición que estábamos viviendo en nuestro sistemapolítico mexicano, en la manera en que se organizaba la sucesiónpresidencial por el partido en el Gobierno, los conflictos yrivalidades políticas.
Señaló que quien haya matado a Colosio, seguramente no buscabala democratización del país, buscaba matar a Colosio y tuvo comoconsecuencia no buscada poner un granito de arena a los cambios queocurrieron pocos años después en el sistema políticomexicano.
Menciona que se ha insistido en que el ideario progresista deColosio lo distanció del presidente en turno, Carlos Salinas deGortari, y que ésa pudo haber sido la razón de su muerte.
Siendo objetivos, señaló, los discursos de distanciamiento delos candidatos a la Presidencia por el PRI respecto al presidenteen turno siempre han ocurrido y en campaña destacan los problemassociales, las carencias que experimenta la gente, las deudasgubernamentales, siempre han sucedido.
Aseguró que no hay un elemento de peso para asegurar que siColosio hubiera sido presidente los problemas se hubieran resuelto,ni serían muy distintas las cosas como lo fueron con Zedillo,quizá pudieron haber habido diferencias.
Cuestionado sobre el hecho de que los priístas consideran almalogrado candidato presidencial como un líder y que fue elúltimo de su clase, dijo que se ha construido un mito bastantefavorable al PRI, tenía un carisma personal bastanteafortunado.
Y en torno a si hay necesidad de que surja un líder para estepaís, dijo que sería más útil mejorar las instituciones, quefuncionen como deben hacerlo para que realmente cumplan con lafinalidad para las que fueron construidas, que atiendan aquello queno se está atendiendo suficientemente ahora, en lugar de un lídercarismático.
Pero también reconoció que al PRI le vendría muy bien unlíder con esas característica, “pero yo insistiría que en lasituación normal de una democracia como la mexicana, más quehablar de un gran líder nacional, lo que podríamos tener sonmuchos liderazgos, algunos liderazgos partidarios y cada uno en elámbito de su influencia para renovar o no a su propiopartido”.
Aseguró que en términos de la izquierda mexicana, eseliderazgo existe sin ninguna duda en la figura de Andrés ManuelLópez Obrador.
También se le preguntó si existe el peligro de otromagnicidio, el investigador de la Flacso reconoció que sí existepero no necesariamente en el figura de un candidato presidencial.Muertes importantes ya se han registrado en la persona delcandidato al Gobierno de Tamaulipas o de muchos candidatos oprecandidatos a presidentes municipales.