Una amplia mayoría del Senado opta por destituir a Rousseff en último debate

Agencia EFE

  · miércoles 31 de agosto de 2016

Foto: Vía @InfobaeAmerica

Brasilia.- Una amplia mayoría de los senadores de Brasil seinclinó hoy de forma decididamente favorable a la destitución dela presidenta Dilma Rousseff, que será sometida a votación en lamañana de este miércoles.

De los 63 senadores que participaron en el maratoniano debate,que se prolongó hasta la madrugada del miércoles, 42 anunciaronque votarán a favor de que la mandataria pierda el cargo, 18 sepronunciaron en contra y tan sólo tres no aclararon susintenciones, pero dieron indicios de que se inclinarán por lamarcha de Rousseff.

Para que se apruebe la destitución, será necesaria unamayoría calificada de dos tercios, equivalente a 54 votos entrelos 81 senadores, una cifra que se presume accesible para losfavorables a la salida de la mandataria por la proporción dediscursos que se oyeron en este sentido.

Los discursos de ambos bandos repitieron los argumentos que sehan esgrimido en las sucesivas etapas que han tenido lugar desdeque comenzó el trámite del juicio político el pasadodiciembre.

Los opositores a Rousseff reiteraron su convicción de que lajefa de Estado incurrió en un "delito de responsabilidad", cargopor el que se sienta en el banquillo, y que se refiere a unasmaniobras con las que se maquilló el resultado de las cuentasfiscales de 2015.

La presidenta, suspendida de sus funciones desde que seinstauró formalmente el proceso el pasado 12 de mayo, responde porla emisión de tres decretos que alteraron los presupuestos sin lavenia del Congreso y por atrasos en depósitos a la banca pública,lo que, según la acusación, sirvió para ocultar créditos alGobierno, que son prohibidos por ley.

Además de por estas acusaciones, muchos senadores tambiénrecriminaron a Rousseff por la honda crisis económica en la queestá sumida el país y por el escándalo de corrupción en lapetrolera estatal Petrobras, que ha salpicado a decenas dediputados, senadores y ministros de todos los colorespolíticos.

Los seguidores y correligionarios de Rousseff reiteraron que elproceso no tiene fundamento legal y se trata de un "golpe deEstado".

El senador Lindbergh Farias, del Partido de los Trabajadores(PT), dijo que la destitución tiene el doble objetivo de "salvar"a los sospechosos de beneficiarse de la corrupción en Petrobras,porque la salida de Rousseff les permitiría torpedear lasinvestigaciones, y de dar un "golpe de clase contra lostrabajadores, las mujeres y los negros".

"Quieren reducir los salarios, aumentar los beneficios delempresariado y entregar (los ricos yacimientos del) presal a lasmultinacionales del petróleo", afirmó Farias.

Los únicos senadores que no aclararon sus intenciones fueron elexpresidente Fernando Collor de Mello, quien renunció a laPresidencia en 1992 durante un proceso similar al que afrontaRousseff, el laborista Acir Gurgacz y Rose de Freitas,correligionaria del presidente interino, Michel Temer.

Estos tres senadores votaron a favor de darle curso al procesocontra Rousseff en dos votaciones realizadas en etapas anterioresdel juicio político en el Senado y, en sus discursos de hoy,insinuaron que se inclinarán a favor de la destitución.

Collor de Mello se refirió más a su propio "impeachment" queal actual, pero fue muy crítico con el Gobierno de Rousseff, alque acusó de ser el "origen" de la crisis que vive el país.

En la sesión iniciada el martes y concluida en la madrugada dehoy miércoles, se celebró el debate final, en el que primero laacusación y la defensa presentaron sus alegatos y después, lossenadores tuvieron el derecho a la palabra durante diezminutos.

El presidente del Tribunal Supremo, Ricardo Lewandowski, quienpreside el juicio político como garante constitucional, fijó elinicio de la sesión de la votación final a las 11.00 hora local(14.00 GMT) de este miércoles.

En esa última audiencia, dos senadores inclinados a condenar aRousseff y otros dos que se opongan a su destitución tendrán cadauno cinco minutos para exponer sus alegatos y el presidente de laCorte Suprema leerá una versión resumida del informe final delcaso.

Luego se procederá a la votación, que será nominal, públicay por medio de un sistema electrónico, por lo que el resultado seconocerá de inmediato.

Una vez proclamado por el presidente del Supremo, Rousseffestará fuera del poder o, por el contrario, si fuera absuelta,recuperaría el cargo y relegaría otra vez a la vicepresidencia aMichel Temer.

/RPE