A pesar de los esfuerzos emprendidos por autoridades de Seguridad Pública, el número de desapariciones ha ido en aumento, aunque no se reflejan en las cifras oficiales, al tiempo que existe un problema en la atención para la búsqueda y atención de personas desaparecidas.
De acuerdo con los colectivos de búsqueda, la información oficial es que en Sonora existen alrededor de 4 mil 600 personas en calidad de desaparecidas, mientras que poco más de mil 200 restos óseos no han sido identificados y continúan al resguardo de las instituciones oficiales.
Cecilia Delgado Grijalva, dirigente del colectivo Buscadoras por la Paz, mencionó que uno de los principales problemas es la aplicación de técnicas forenses para la identificación de las personas que se encuentran en calidad de desaparecidas, por lo que 16 colectivos se reunieron con el gobernador Alfonso Durazo el viernes 9 de junio para tratar este y otros temas que les atañen.
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Sin embargo, señaló que otro de los temas pendientes en la agenda de los colectivos de búsqueda es el notorio aumento en el número de desapariciones forzadas, aunque no sean oficialmente denunciados, pues cada vez más las familias afectadas se acercan a los colectivos de búsqueda para reportar alguna desaparición.
“Hay muchas desapariciones, pero recibo de dos a tres reportes de desapariciones diarias, muy raro el día que no llamen para reportarme a alguien y la verdad eso es lo que hemos tenido pendiente, de lo que va de enero a junio tenemos que ver cuántas desapariciones hay, no nomás en Hermosillo, sino en el Estado.
“Sin contar lo oficial, porque sabemos que están fuera de lugar esos números, nada que ver, sabemos que se puede duplicar o hasta triplicar, que tienen como 4 mil 600, pero sabemos que no, es muchísimo más que eso y el dato exacto no lo tengo, pero sabemos que están aumentando las desapariciones”, explicó.
Ante esta falta de confianza hacia las instituciones, resaltó que es necesario contar con mejores herramientas para denunciar y, sobre todo, para atender los casos reportados, pues constantemente llegan reportes de municipios como Magdalena, Nogales, Guaymas, Ciudad Obregón y Hermosillo, entre otros.
Por ello, la activista aclaró que es necesario que las autoridades correspondientes continúen con las investigaciones, pues en muchos casos, son las mismas madres y familias de personas desaparecidas las que se encargan de indagar en los hechos.
Agregó que la mayoría de los restos que no han sido identificados se encuentran en fosas comunes, por lo que se requiere de mayor capacidad en anfiteatros, así como mayor personal para lograr mejores resultados.
“Queremos saber por qué tantos están ahí, si no están funcionando las pruebas de ADN, si no tienen el suficiente personal para poder que esas muestras se lleven a cabo y hacer el trabajo que les corresponde, por qué tantos en la fosa común, probablemente el familiar que estamos buscando esté ahí, así ha pasado con mi colectivo, que su familiar tiene cinco años en fosa común, mientras está siendo buscado”, detalló Cecilia Delgado.
De amenazas e inseguridad
Algunas activistas y madres buscadoras han sufrido amenazas, agresiones e incluso, en el contexto nacional, se han presentado ejecuciones, la más reciente ocurrida el pasado 2 de enero, en el municipio de Celaya, Guanajuato, donde Teresa Magueyal, del colectivo Una Promesa Por Cumplir fue asesinada a balazos mientras iba en bicicleta, por dos hombres a bordo de una moto, alrededor de las 12:00 horas.
Asimismo, el pasado 21 de mayo se presentó el secuestro de Yessenia Durazo, integrante del colectivo Madres Buscadoras de Sonora, quien fue privada de la libertad por hombres armados cuando salía de su casa, en Arivechi, al cruzar hacia la plaza pública para hacer una llamada telefónica.
Sin embargo, para el 26 de mayo, la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora informó que la activista ya había sido localizada y desde la mañana del 25 de mayo anterior ya había vuelto sana y salva a su hogar, con su familia, por su propia cuenta.
Cecilia Flores Armenta, líder del colectivo Madres Buscadoras de Sonora, indicó que durante los últimos años ha recibido amenazas e intimidaciones por parte de personas anónimas, quienes le envían imágenes de personas siendo torturadas y descuartizadas, insinuando que ella tendrá el mismo final.
“Mi tema es que estoy sufriendo amenazas muy fuertes de un tiempo para acá, desde hace unos días las amenazas se incrementaron tan fuerte que me siento torturada psicológicamente, como lo he hecho saber a los medios y a las autoridades al ir a poner una denuncia, dándoles perfiles, números de teléfono y toda la situación que estoy viviendo”, subrayó.
En ese sentido, manifestó que las autoridades han hecho muy poco para frenar esta situación, pues desde hace más de dos años ha solicitado protección permanente en todo el país, aunque únicamente se le ha brindado en Sonora y Sinaloa por parte de las autoridades estatales, a pesar de lo que diga el Gobierno Federal respecto a la protección a madres buscadoras.
“Lamentablemente -dijo- la carpeta de investigación que empecé en el 2021 pues está igual como yo la dejé, no ha habido ningún avance con las autoridades, ningún avance en el tema de las amenazas que he recibido, cuando les di perfiles y ellos con su tecnología podrían haber hecho algo, pero al momento no hay nada. Si ellos quisieran, ya tuvieran a la persona que me las manda, porque a los teléfonos tienen que dar un nombre para comprarlos, o en todo caso tienen un GPS para rastrear de dónde salen tantas llamadas y del mismo teléfono. Las amenazas son por llamadas, por WhatsApp y por Facebook”, comentó.
La activista reiteró que su único objetivo es encontrar a sus hijos, sin exigir justicia ni señalar a los probables responsables, por lo que espera que, con la llegada del nuevo Fiscal a Sonora su situación mejore.
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“Entró un nuevo fiscal que dice que va a trabajar a la par con las víctimas, brindando todo el apoyo que necesitamos y pues, espero tener ese apoyo por parte de ese fiscal en la investigación, y que puedan salir a la luz las personas o la persona que me está amenazando”, apuntó.
Asimismo, hizo un llamado a las mujeres y familiares de personas desaparecidas para evitar caer en el miedo y exigir a las autoridades que hagan el trabajo que les corresponde y permitan que se realicen búsquedas de personas desaparecidas para darles un descanso y tranquilidad.