Rafael Peregrino sigue a la espera que llegue el dinero para reconstruir su vivienda decretada con pérdida total, en la esquina de la calle 5 de febrero y Avenida Puerto Arista, muy cerca de las vías del ferrocarril carguero que pasa cada dos meses por el municipio de Tonalá.

Con la mirada perdida entre escombros, narra a cuentagotas cómo era su patrimonio ahora hecho añicos. De la gente encargada de entregar dichos recursos nada se sabe, no se aparece y no llega a uno de los municipios más golpeados por el terremoto del pasado 7 de septiembre.

En el perímetro donde vivía Rafael otras tres casas fueron demolidas por presentar daños severos. Ahora esas familias tienen que buscar dónde vivir, dónde comer, incluso rentar espacios para poder tener un techo improvisado, mientras los recursos que no saben si llegarán en tarjetas, efectivo o de otra forma llegan a esta parte del estado de Chiapas.

Así como don Rafael, nativo de Tonalá, muchas familias tienen que desembolsar de 2 mil a 2 mil 500 pesos mensuales en rentas, aunado a las deudas que ya arrastraban y el sostén de sus hijos, ancianos y demás seres queridos que viven apenados por la situación.

“Las casas vinieron a tirarlas desde el pasado 4 de octubre, desde entonces no hemos sabido nada y sólo tenemos a la manos los folios con los que nos dijeron fuimos censados”, explica mientras revisa entre escombros si olvidó algo de sus pertenencias.

Y es que los papeles foliados por el gobierno lucen pálidos, con las letras borrosas y sin sellos o firmas que garanticen estas familias recibirán las ayuda cuanto antes. Sólo se observan los nombres de los propietarios de las viviendas dañadas, la dirección y referencias que ubiquen a los funcionarios que quién sabe dónde están.

Doña Margot de Lucio no quiere abandonar su hogar. Las autoridades de Protección Civil le dijeron que la estructura presentaba daños parciales, sin embargo teme que en cualquier momento tiemble de nuevo y todo se venga abajo. Le mencionaron también que su vivienda sería reparada, pero hasta ahora continúa en la incertidumbre y sólo tiene en sus manos el papel foliado. Es otra afectada que espera llegue la ayuda.

Tonalá sigue recibiendo el sol a quemarropa, su gente permanece en las calles incrédula aún de la tragedia. Los que no entraron al censo acuden casi todos los días a la presidencia municipal a solicitar ayuda, pero sólo les dicen que “ni modo” y si no estuvieron en el censo, se perdieron la oportunidad.

Aseguran los damnificados que fuera del padrón hay, por lo menos, 350 familias que no han sido enlistadas para recibir la ayuda que aún no llega.

ANOMALÍAS EN LOS CENSOS

Elementos de la Policía Federal División Gendarmería realizan tareas de limpieza en viviendas que fueron dictaminadas con daños totales en el municipio de Tonalá.

A su vez, la Secretaría de Marina recorre sitios donde pudiera levantar escombros, pese a que la etapa de reconstrucción en Chiapas avanza de forma lenta.

Organización Editorial Mexicana (OEM) constató algunas anomalías en el padrón de damnificados, ya que en algunos casos las personas afectadas resultaron con daños en la totalidad de la estructura y fueron valorados con daños parciales, situación que podría arrojar descontento social en cuanto Sedatu comience a ejecutar la reconstrucción que ya está estipulada.

Laina Juárez, una de las afectadas, narra que desde un principio su vivienda quedó reducida a escombros, sin embargo, al momento que le otorgaron el folio para la reconstrucción su estatus apareció con daños en algunos sectores de la casa.

“Ahorita sólo estamos viendo cómo los oficiales mueven todos los escombros para que el espacio quede limpio y allí se pueda construir, aquí estamos afuera viendo todo el día y ya por la noche nos vamos a refugiar a casa de familiares, aquí desayunamos y comemos porque queremos ver cómo avanza esto, pero nos preocupa el hecho que nos estamos dictaminados como debe ser”, dijo.

Como el caso de Laina, otras familias relatan misma situación donde los dictámenes muestran inconsistencias.

Llevan educación a los albergues

En una labor coordinada entre las Secretarías de Comunicaciones y Transportes (SCT), de Educación Pública (SEP) y el gobierno del estado de Oaxaca arrancó el proyecto “Albergue Conectado” mediante el cual se transmite la programación de “Educando TV” en los espacios en donde se alojan las personas -entre ellos escolares- que resultaron afectadas por los sismos del pasado mes de septiembre.

Se instalaron cinco pantallas en los albergues ubicados en el Instituto Tecnológico del Istmo y en la explanada de la Iglesia de Los Pescadores -Séptima Sección-, ambos en este municipio, con el fin de transmitir las clases que se imparten a través de la principal alternativa pedagógica audiovisual del país denominada “Educando TV”, cuyos contenidos se basan en el calendario oficial de la SEP de educación básica, desde preescolar hasta secundaria.

Con el apoyo de la Corporación Oaxaqueña de Radio y Televisión (CORTV), el Ieepo produce y transmite por televisión abierta e Internet los contenidos de educación básica y el uso de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC).

Más de 300 Personas aún en albergues

A un mes del terremoto del 19 de septiembre, la Ciudad de México va recuperando la normalidad y su ajetreo diario, pese a ser la entidad con la mayor cantidad de personas fallecidas, 225.

Miguel Ángel Mancera, jefe de Gobierno de la Ciudad de México, presentó ayer algunas cifras del avance de la situación capitalina

Trece albergues aún prestan servicio a 366 personas, quienes pernoctan en ellos. Cinco personas continúan hospitalizadas, principalmente por fracturas expuestas derivadas del sismo, en nosocomios de la ciudad.

Pipas de agua han movilizado 497 millones de litros a las zonas donde resultó comprometida la red hidráulica, principalmente Iztapalapa y Xochimilco, Además, el gobierno capitalino ha repartido 77 mil 985 raciones alimentarias.

En cuanto a la actividad económica, mil 600 negocios tuvieron algún tipo de daño, ya sea físico o bien que por los acordonamientos de la zona no tuvieron actividad económica esos días. Se calcula en cerca de 16 mil personas que trabajan en estos negocios.

Iglesias y pobres, los afectados en Puebla

PUEBLA, Pue.- Un total de 46 decesos; afectaciones parciales y totales en 28 mil 524 viviendas, 216 escuelas y 471 iglesias de 112 municipios; hospitales saturados por el desalojo del IMSS de San Alejandro; 175 mil niños sin clases, y 12 albergues en los que se brinda atención a 121 personas es el saldo que se tiene en Puebla a un mes del terremoto del 19 de septiembre.

Oficialmente, las autoridades estatales solo tienen contabilizados 45 fallecidos por el temblor; no obstante, dos semanas después murió la atlixquence Hermelinda Cardoso a consecuencia de las quemaduras provocadas por la explosión de un boiler el día de la tragedia. A los deudos el gobierno estatal los indemnizó con cinco mil dólares.

El pasado lunes culminó oficialmente el censo de los daños, y el saldo es de 28 mil 524 viviendas con afectaciones menores, parciales y totales, pertenecientes a familias con pobreza patrimonial.

En el caso de escuelas, se registraron impactos en mil 216 planteles. La Secretaría de Educación Pública reportó que al 17 de octubre, 175 mil alumnos aún no habían reiniciado clases.

En cuanto a infraestructura de salud, 36 unidades del IMSS, el nosocomio del ISSSTE, siete hospitales generales del estado y 51 clínicas estatales tuvieron daños.

Según el gobernador Antonio Gali Fayad, son 491 iglesias y templos los que resultaron impactados por el movimiento telúrico, de los cuales 123 son de alto riesgo.